Ents
porteños enardecidos: “Nos están eco-desalojando”
Por
Madre Naturaleza Socialista
La
reciente tala de árboles en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en la Avenida 9
de Julio no solo ha afectado el manto verde de la reconocida arteria de
tránsito, sino que está provocando estragos socio-eco-habitacionales.
A la reciente
insurrección de las palomas y gatos abandonados en las plazas porteñas (que no
tuvo éxito al enfrentarse a las poderosas topadoras comandadas por fuerzas humanas)
ahora se le suma la crítica situación de los Ents locales. Los mismos se
hallaban habitando los islotes verdes de la avenida, donde además de nutrirse
se habían convertido en un atractivo turístico.
«Nuestro
pueblo es pacífico, no tenemos en nuestras venas la sabia belicosa para
organizarnos en un movimiento eco-social y protestar por el desalojo que
estamos sufriendo. Lamentablemente no somos como nuestros antepasados que le voltearon
la casa al brujo Saruman» declaró uno de las afectados por la tala.
Recordemos
que esta comunidad arbórea ya había aparecido en los medios hace unos años cuando radicaron
una denuncia por «Discriminación de especie vegetal» contra los ceibos y jacarandás,
quienes los habrían agredido por ser «una especie inmigrante y de países ni
siquiera limítrofes que vienen a robarles su trabajo como parásitos terrestres
de este noble suelo argentino» según consta en la causa. La misma, ahora elevada
a juicio oral y público se definirá en las próximas semanas. Recientemente un representante
de la comunidad de ceibos apareció en el programa de Samuel ‘Chiche’ Gelblung y
declaró que «Esta especie además de inmigrante de un folklore colonialista es
pelotuda: mirá que se van a venir de Inglaterra o de Europa en general a echar raíces
en Argentina».
Mientras
tanto, los desplazados mitológico-vegetales se han quedado sin hogar y se han
dirigido al conurbano bonaerense a los efectos de encontrar un nuevo suelo. «¿A
vos te parece? Primero nos teníamos que fumar a todos los nerds fanáticos de
Tolkien que se iban a hacer reuniones a nuestros pies y ahora nos han sacado
nuestra tierra» declaró una Ent furiosa pero sin voluntad de llevar a cabo una
protesta social.
Actualmente
se espera una segunda insurrección de las palomas bonaerenses que, pese a ser
tildadas de «boludas» por el común de la gente, están organizando un grupo
comando para bombardear con sus excrementos la casa de Gobierno. Seguiremos informando